El chango “agachado”:
¿Alguna vez te has preguntado?…
¿Por qué a una tortuga de Galápagos,…aunque vive tantos años (y muchos más que un ser humano)…no le dan alergias, ni migrañas,…ni edemas…ni fibromialgia?
¿Por qué un antílope que corre libre por la pradera en Zambia no se muere de accidentes cerebrovasculares, ni infartos…ni le da gota, diabetes o lumbalgia?
¿Por qué al elefante que vive al natural, en manada en Botswana, no le da lupus, ni colitis, ni reflujo, ni anorexia?
¿Por qué las ballenas francas de Groenlandia no sufren de artritis reumatoide, cirrosis, gastritis o epilepsia?
…¿Por qué un animal al natural prácticamente no se enferma?
….pero nosotros sí…
….
Porque viven en el mundo REAL. Se mueven en base a las llamadas “realidades de PRIMER ORDEN”: un plano simple,…concreto, directo,…elemental.
Para un animal la vida es lo que es. No tiene pierde. Porque está diseñado para enfrentarse a la adversidad,…y reaccionar,…y claro que sufre,…pero la diferencia es que después de sufrir simplemente RESUELVE. Y sin duda se enferma y se inflama tras un shock, un conflicto activo,…una amenaza,…una señal de peligro. Pero no se cicla,…no regresa. El animal mientras más primitivo,…tiene menos “mente” y por lo tanto,…es más hábil para volver al equilibrio. No se estresa. Sencillamente confía y acepta su papel en el universo y en su naturaleza.
Pero nosotros sufrimos…
Nos movemos más en realidades llamadas “de SEGUNDO ORDEN”: Imaginarias,…creadas por nuestra educación,…nuestra cultura, vivencias, creencias,… expectativas, conflictos, miedos y pendejadas. El hombre en vez de fluir….SUFRE…por lo que le ha pasado y “no esperaba”…porque las cosas no son como él pensaba,…quería y anhelaba…y porque tiene miedo de que en el futuro le siga yendo de la fregada.
Solo el animal en cautiverio realmente enferma. Basta ver a los pobres jodidos del zoológico para entender perfecto el problema. Porque los sacan del bosque, del mar o de la selva…y los llevan al encierro, al maltrato, la restricción,…la limitación del movimiento. Ese es el tema: Cualquier ser que no es libre,… simplemente está muerto. El cautiverio hiere, lastima y envenena.
¿Y cuál es nuestra realidad?
Creamos nuestros propios “cautiverios”,… encierros ficticios. Nos privamos de nuestra “libertad”, porque vivimos y trabajamos para los demás y no para nosotros mismos. Porque nos encerramos en las “jaulas de la represión”…y nos guardamos nuestras sentimientos y ocultamos nuestra emoción,…oprimidos siempre por nuestra “razón” y nuestra imaginación. Porque vivimos con miedos, celos, apegos y para actuar nos “empuja” la desvalorización. Porque nos han enseñado a seguir a la MENTE que no se calla,…en vez de seguir a la intuición.
Y no está mal,…pero al menos el observar,…a mi me lleva a pensar…que estamos atacando a la enfermedad desde un equivocado lugar. Nos llenamos de medicinas,…atacamos con toda la artillería a los síntomas…en lugar de explorar nuestro estilo de vida y nuestra emocionalidad. Para mi es muy claro…y es la verdad…
…Nos hundimos en nuestros problemas…
Y como este pobre chango agachado que me encontré en un zoológico encerrado…así, pues sin duda te enfermas.
Al verlo ahí,…además de partirme el corazón,…cómo me puso a pensar…
¿Quién será más animal?
¿Cómo sería el mundo si el hombre fuera más capaz de soltar,…de dejarse llevar,….de aceptar la vida como viene,…de dar lo mejor que tiene con lo que hay,…como cualquier animal. ¿Cómo sería el mundo si dejáramos de “luchar”,…si fuéramos más hábiles…para fluir con naturalidad?…
Enseñemos a nuestros niños a vivir y disfrutar el presente,…a MEDITAR,…a apagar a la mente,…a tener INTELIGENCIA EMOCIONAL,…darle prioridad por sobre muchas tonterías que les enseñan en la escuela. Más que “medicinas para todos”… sería el primer gran brinco…
….para minimizar la “enfermedad”.