La cuerda de la guitarra:

¿Crees que estás un mundo físico,…material? Así lo percibimos. Newton lo describió como tal.

Y está bien. Así lo entendemos con los lentes que traemos. Pero mirando a profundidad….

Podría no necesariamente ser cómo creemos.

La física cuántica nos ha obligado a cuestionar lo que hemos aceptado tanto tiempo como verdad.

¿Que somos en realidad?

Átomos.

Un puñado de átomos….

….y tus átomos vibran. Igual que un tornado,…que gira sin parar.

Un pequeño huracán.

¿Y si te dijera que cada uno de tus átomos es inmensamente más “vacío”…que “partícula”?

Entonces estrictamente somos menos “algo”…y más “nada”. Una ilusión. Un teatro que no es real. Una figurada simulación.

Y te diría…

Que sabemos que tus átomos forman moléculas, y tus moléculas…células,…que se comunican, funcionan…y trabajan…en coordinada sincronía.

¿Pero sabias…

…que cada una de tus células es una pequeña batería? Una pila de 1.4 Volts para ser exactos. Una bomba de protones en la pared celular (el “cerebro” de la célula) crea el gradiente eléctrico,…que origina esa maravilla.

40 billones de células en toda tu economía. Y en conjunto forman tejidos, …órganos y sistemas. Y al igual que sus pequeños átomos…también tus organos vibran.

Tú vibras. No eres un acúmulo de “canicas”.

¿Que crees? Eres un gran campo bioelectrico. Un generador…

Eres energía.

Y aunque no lo veas,…este campo forma un halo energético a tu exterior. Un enredo de ondas que suman o se anulan,…cuando entran en contacto e interaccionan con otros cuerpos que se encuentran a su alrededor.

Y un animal, un árbol, una piedra. Todos tienen una vibración.

“Buena…o mala vibra”…que los escépticos niegan…ya tiene una contundente demostración.

Somos onda…y nos hacemos visibles solo ante nuestra visión. Nos vemos por el fenómeno de la luz…y nunca nos tocamos. Ni nos tendríamos que tocar porque no estamos separados. Pero al “tocarnos” solo nos acercamos…y el contacto no es más que una aproximación energética,…que nuestros receptores cutáneos captan como una sensación.

Y no morimos…y cuando “morimos” no nos vamos. Pasamos a un plano energético fuera de nuestro cuerpo y percepción. El átomo nunca muere. Morimos porque nuestro sistema “físico” simplemente deja de responder al estímulo exterior.

A nivel medicina,…la ciencia está empezando a avalar lo que desde hace tantos años los primeros médicos místicos usaban para la sanación. Lo que trabaja el Chamán. La medicina energética. La intuición. Los Chakras. El curar a la gente con la catarsis, el trance,…la vibración. La interacción bioeléctrica, el trabajo psico-emotivo,…el cambio de creencias,…el yoga,…la conciencia,…el poder de la meditación.

Estamos empezando a comprender que el sanar la mente y las emociones…es una cura 100 veces más potente que cualquier medicación.

Y a nivel macro,…ya más para arriba…

No estás separado del otro. Somos uno. Cada uno es una célula que forma un cuerpo llamado “Mundo”. Y lo hemos enfermado. Nuestro “cuerpo” está en emergencia,…en agonía.

Y como “tumor”,…sientes que como célula única,… necesitas más que los demás. Y tiendes a querer tener…y jalar para ti las cosas de una manera voraz. Tu ego sufre porque te percibes víctima del entorno y de tus genes…y que las cosas no deberían ser así. Y no estás en paz…

Pero la vida es como es,..no cómo quieres que sea…

Y nuestra “evolucionada” corteza cerebral,…que nos hace “pensantes” y nos separa del animal,…al final,…resulta el fondo del problema.

Eres la cuerda de una guitarra…

¿Cómo vibra,…cómo suena?

¿Está afinada?

Eres parte de un instrumento más de la orquesta…

¿que hace acorde o desafina?….

Solo una cuerda…que emite una tonada en esta sinfonía.

¿Positiva o negativa? ¿Que solo sobrevive para esperar la muerte o que está viva? ¿Eres una vibra que odia…o ama? ¿Que explota…o está en calma? ¿Que compite o coopera? ¿Que fluye…o que reclama…y lucha con la vida?

… ¿Que transita en la depresión,…o en la aceptación y la alegria?

¿Sabes que en el fondo…tu emocionalidad es lo que él 90% de las veces te lleva a enfermar?

Que ironía…

Te has puesto realmente a pensar…

….¿Cómo estás decidiendo vibrar?

¿Cuál es el tono…

…de tu melodía?